Es una dulce dama que conozco desde hace algunos años, que puede ver en la simplicidad de la naturaleza y de su entorno, las maravillas y las esencias de un mundo fascinante que a veces no podemos interpretar y apreciar.

Mariella ha tenido esta pasión por la pintura desde que era niña, un camino artístico que se ha desarrollado con el tiempo. Encontró sus musas en las flores, en los días soleados, en los paisajes, en el cielo estrellado, todo esto lo podrás apreciar en sus pinturas. Obras maestras del arte que fueron pintadas en la tranquilidad de las largas noches Vidorese.

Las pinturas de Mariella ofrecen la oportunidad de emprender un viaje mágico hacia una dimensión surrealista, donde el mundo de los colores y sus matices llenan el corazón de emociones únicas y mágicas.